La Plaza de España acogió la noche del pasado sábado el acto de la «Quema de Judas»

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Sábado de Gloria, víspera de la Resurrección. En la Plaza de España un monigote recuerda una traición. Pronto arderá entre las llamas y los fuegos artificiales en un espectáculo al que cada año se suman más lorquinos y que está organizado por la Archicofradía de Jesús Resucitado. Se trata de una tradición que se remonta al siglo XVIII, tal y como se recuerda en la publicación editada por la Archicofradía.
«Al iniciar el toque de campanas, y en diversas calles y plazas de Lorca, se prendía fuego a muñecos forrados de tela, rellenos de papel y cartón, al tiempo que se les lanzaban piedras y disparaban con arcabuces y mosquetes. A esta costumbre se unía también la rotura de cacharros hechos de barro y la tirada de piolas por la chiquillería».
No eran los únicos hábitos que se ejecutaban. «Asimismo era tradicional el uso de pólvora durante la procesión del Resucitado, lanzando cohetes y disparando armas de fuego en señal de alegría por la Resurrección». La ‘Quema de Judas’ marcó el inicio de los actos organizados por la Archicofradía. Tras esta peculiar representación, partió desde la Colegiata de San Patricio la Virgen de la Encarnación hacia la iglesia de Santa María.

Fuente: La Verdad